Piolar despierta de su letargo y luego ve que está en una celda común  este muy asustado exclama: ¡Donde estoy!

–Estas en la celda 8 de la comisaria principal de Zootopia – contesto una voz femenina; –El porque es muy simple, pero obvio esa acusado bajo cargo de extorción, lavado de dinero, robo, tráfico de armas de fuego, asociación para delinquir y dispárale a un oficial de la ley – explico ella.

Piolar asustado prefirió quedarse callado luego de que la coneja leyera todos los cargos y ahí la hembra ante aquel silencio de acusado dice: ¡Eso pensé! Jean Piolar desde este momento queda detenido por lo cargos anteriormente mencionado en su contra por tan motivo que se le recuerda que a partir de este momento tiene el derecho a guarda silencio sino todo lo que diga será usado en su contra en una corte, tiene derecho a un abogado de no poseerlo el estado le proporcionara uno, tiene derecho a una llamada telefónica y a servicio médico de necesitarlo, entendió todo lo que dije.

–Si oficial –contesto Piolar.
La coneja anoto la declaración de Piolar de sujeto en su libreta y ante de retirase dijo: Eso es todo, no soy la Leona Maravilla. Al escuchar la puerta del ala de celda abrirse para luego cerrarse, entonces el plantígrado suspira y exclama: ¡Que he hecho!

La lagomorfa se presenta ante la recepción para entregar la carpeta de Piolar y cuando la entrega exclama: ¡Caso cerrado!

–Eso me hizo recordad un programa latino – comento el nuevo recepcionista.

–Caso cerrado con la doctora polo – respondió Judy.

– ¡Ah sí!, ese donde ella gritaba al terminar cada caso… –

– ¡CASO CERRADO! – gritaron ambos agentes.

En ese instante un imponente búfalo llega a la recepción y proclama: Buena Tarde Hopps y Okagen.

–Buenas tarde Jefe – contestaron ambos agentes.

–Hopps gracias a dios te encuentro aquí porque Siul me dio fuerte instrucciones de mandate a casa inmediatamente para que descanse y hagas otra cosa que esta todo el día aquí metida sin tu compañero – informo Bogo.

–Bueno jefe iba a esperar a que usted llegara para pedir permiso para ir al hospital para ver como esta mi compañero – pondero Judy.

– ¿Qué le paso a Nick? – pregunto Declack llegando a la recepción.

–Nada que a ti te incumba – contesto Judy algo enojada.

–Nick fue herido de bala, pero pronto se mejorara – replico Bogo.

– ¿Cómo, cuándo y dónde?– pregunto Declack.

–Hoy en la mañana justo cuando hacíamos el operativo de captura a Piolar – contesto Judy de mala gana.

– ¿Pero qué paso?, ¿dígame cómo fue? – pregunto Declack.

–Piolar le disparo justo cuando lo teníamos al frente – contesto Judy altaneramente.

– ¿Pero está bien?, ¿puedo ayudar en algo? – pregunto nuevamente Declack.

–La verdad es que… –

–No – respondió Judy firmemente.

–Oficial… –

– ¡Perdón!, detective – asevero Judy altaneramente.

–Detective Hopps usted no es nadie para decidir sobre Wilde – proclamo Declack.

– ¡Soy su novia! – Contesto Judy firmemente retirándose de la recepción en dirección a la puerta; –Y espero no verte en hospital – agrego la coneja sacando el dedo del medio.

Declack, Bogo y el recepcionista ven como la coneja desaparece de la puerta llena de mucha confianza, luego Declack exclama: ¡Maldita Puta!

– ¡Señorita Declack! – exclamo Bogo indignado.

– ¡Tu cállate! – proclama Declack molesta retirándose del lugar.

Bogo y el recepcionista se queda solo y allí el búfalo dice: Mujeres quien la entiende.

–Haga lo mismo que yo jefe y hágase el loco – contesto el recepcionista.
–Pues pienso que voy a aplicar eso a partir de hoy –replico Bogo; –Por cierto Okagen llama a madre de Wilde para que sepa sobre lo ocurrido – puntualizo Bogo.

–Delo por Hecho Jefe – contesto Okagen

–Y también el hospital donde está recluido – puntualizo Bogo.

–Entendido Jefe – contesto Okagen alegremente.

Bogo finalmente deja de la recepción y suba a su oficina para seguir con su vida.