Amanece en la cuidad de Zootopia en donde se
aspira una profunda tranquilidad y más en una celda de máxima seguridad donde
yacía un oso polar quien dormía plácidamente. Los rayos del sol pegaron en los
parpados de plantígrado quien poco a poco se despertaba de su letargo por un
momento aquel oso se había olvidado de que le paso el día anterior y pensó que
todo aquello se debía a una muy poderosa resaca, en ese instante el oso se
froto los ojos y exclama: ¡Qué diablos paso anoche!
–Yo te lo puedo decir – contesto una voz
femenina quien contesta la interrogante del oso.
El oso se sorprende y termino abriendo los ojos
finalmente, para su sorpresa ve que está dentro de un espacio reducido parecido
a de una celda y allí este se da cuenta que definitivamente está en una; junto
a una coneja que lo veía con mucho resentimiento y allí está nuevamente dice:
Sé que está confundido y yo te culpo, pero yo te lo puedo aclarar. Piolar trato
de levantar su pata derecha para propinarle un zarpazo a la coneja que lo
acompañaba pero no pudo hacerlo debido al hecho de que estaba esposado,
nuevamente la lagomofa dijo: Sé que ibas a hacer y con ello tal vez le añadiría
otra raya al tigre, pero yo soy mas lista que cualquiera y no te iba a dejar,
sabes porque…
–No – respondió Piolar algo nervioso.
–Porque quiero darte una advertencia que espero
que nunca se te olvide y es que si te vuelve a escapar o si quiera pensar en ello,
yo iré por ti y esta no dudare en matarte, y si le haces algo malo a mi novio o
algún familiar mío, no dudare en matarte, ya conociste a la Judy buena onda,
conociste a la Judy loca, no hagas que conozca a Judy sádica porque esa sí que
no se detiene ante nada, ni nadie, así que no hagas que conozca a esa Judy porque
ahí yo no respondo – explico Judy muy molesta.
–Entendido – replico Piolar.
–Así que quédate detrás de las rejas y no
salgas nunca porque si no conocerás a la última Judy y ya sabes que allí ya no responderé
– apunto Judy aun molesta.
–Entiendo oficial… –
–Judy, Judy Hopps, espero y aspiro no tener el
placer de volverlo a ver porque si no lo mato – indico Judy.
–Descuide Oficial Hopps, jamás nos volveremos a
ver – apunto Piolar.
Judy se paró de la silla que ella misma había
colocado y allí con toda la tranquilidad de mundo dijo: ¡Eso espero! En ese
momento toca la puerta y espera a que el timbre de la puerta de acceso le
otorgue la salida, cosa que pasa en
menos de cinco segundos, pero antes de que esta saliera el oso enfatizo: Fue un
placer conocerla.
–El placer no fue mutuo – contesto Judy
firmemente saliendo de la celda y con ello aquel caso, ella aspiraba haber
cerrado para siempre un capitulo en su vida de una buena vez por todo.
Mientras tanto en la jefatura de policía de
Zootopia, Bogo se preparaba para el arribo de la comisionada Siul, en ese
instante entro la oficial de asunto interno y vio a Bogo muy nervioso y dijo:
¡Tranquilo ella no muerde! Bogo se asustó a ver quién era y descubrió que era Declack
y allí este dice: ¡Ah! ¡Eres tu Declack, pensé que era Siul!
– ¡Ya viene! Y me alegra un monto que hayas
descubierto a culpable de escape de Piolar y también me alegra saber que tus
detectives lo hayan atrapado – profeso Declack.
–Para que veas, que cuando nos exigen algo
cumplimos con nuestro objetivo – contesto Bogo.
–Y espero que sea así toda la vida, porque de
verdad necesito oficiales como tú en mis filas – aclaro Siul entrando a la
jefatura.
–Cuente con ello comisionada – replico Bogo
nerviosamente.
–Bogo tengo algo para tus oficiales estrella y
para unos nuevos también, a tu oficiales Nicholas Wilde y Judy Hopps fueron
ascendido a detective grados 2 y sus oficiales Frederick Newman y Mercy
Espinales fueron ascendido también, pero ellos fueron ascendido a sargentos, no
a detective – indico Siul.
– ¿Por qué ello todavía no optan al grado de
detective? – pregunta Bogo algo extrañado.
–Porque a diferencia de Hopps y Wilde, ellos
dos no han tenido mucha acción por lo cual le recomiendo señor Bogo que le
asigne alguna que otra misiones para que estos dos se ganes su estatus de
detective – aclaro la comisionada.
– ¡Entendido! – contesto Bogo; – ¿Otra cosa? –
pregunto el búfalo.
-Tú debes asígnale más misiones a los nuevos
para que esto suban de categoría y ubique al señor Garraza hace días que debió
regresar – agrego la comisionada.
–Considero hecho todo lo que usted me dijo,
excepto lo último, nadie sabe dónde está Garraza es como si se hubiese
convertido en un fantasma – contesto Bogo.
–Nadie puede desaparecer así sino más, tiene
que haber un motivo y una razón para haberlo – asevero Siul algo extrañada.
–Quisiera saber cuál fue su motivo comisionad,
pero hasta los momentos no he podido confirmar nada de nada, quizás el solo aparezca
cuando él quiera – proclamo Bogo.
–Señor Bogo, yo no puedo seguir permitiendo que
siga utilizando a mas novato para ser recepcionista ese trabajo es para el
señor Garraza y es su deber ubicarlo lo más pronto posible – ordeno Siul.
–Comisionada creo que es hora de que le rebele
algo que nadie sabe y que todo el mundo desconoce de señor Benjamín Garraza.
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