Al quedarse solo tanto Nick y Judy se quedaron como si con la mirada se estuviese diciéndose todo y allí Nick pregunta: ¿Quieres salir conmigo?

–Por supuesto que si – respondió Judy amablemente.

–Bueno te espero en Gladis Gil – puntualizo Nick.

–Pero Nick, ese es el restaurant más elegante de la cuidad, ni hablar que es muy costoso como vas hacer para reserva un lugar ahí – persevero Judy.

–Tu tranquila y yo nervioso, además no te creas yo tengo contacto hasta en el más allá – asevero Nick firmemente.

–Bueno está bien no vemos en el Gladis Gil, ¿pero a qué hora?–

–A la 7:00 pm – contesto Nick.

– ¡Te espero allá! – exclamo Judy coquetamente retirándose de la habitación. Rápidamente Nick agarra el teléfono y marca un numero internacional.

Son las once de la noche en la cuidad de Paris y todo transcurría pacíficamente y más en una mansión de lujo donde dos gatos reposaban tranquilamente hasta que el sonido de teléfono despertó a uno de los gatos y allí un gato naranja contesto: Me Wii.

–Hola viejo amigo, como estas, de seguro te llamo a mala hora verdad – replico la voz de un zorro.

– ¡Nick!, bastardo estadounidense, cuanto tiempo – contesto el gato alegremente.

–Verdad que si ha pasado mucho tiempo – respondió Nick.

– ¿Y cuéntame que sabes de la pandilla? – pregunto el gato.

–Bueno como sabes, Robín se casó y se convirtió en un lame bota de primera categoría, al igual que Tod quien sigue trabajando para la Interpol, Tobby también se casó y vive tranquilamente en sur con todos sus hijos, John también se casó y aunque no es un lame bota de su esposa si lo es de su hija, ese loco de Brer también se casó y aún sigue viviendo en una granja en su natal Mississippi, tú te casaste con esa diseñadora de moda y también te convertiste en un lame bota de tu esposa y lo único que quedamos fue Finnick y yo, aunque Finnick también se casó su esposa no actúa como dictadora de su vida, no dejamos el trabajo hasta hace no mucho que yo me separe de el por el trasero de una chica que me supero en mi propio juego, aunque era estafa mínima nada de lo que hacíamos durante los 80 y 90, esa si eran estafa – narro Nick.

–Que mal que el grupo este divido, deberíamos hacer un recuento de todo para ver cómo está la vida de cada uno – asumió el gato.

–Mi primo Robín no sé si asistiría adora tanto a su esposa que no separa de ella solo cuando va trabajar, en cambio Tod si asistiría pero su esposa la franco canadiense no lo dejaría venir, John si asistiría porque su esposa no es tan controladora pero si lo es su hija, el loco de Brer mejor ni te cuento y Tobby tampoco vendría aunque quisiera ya que este debe está pendiente de todos sus hijos y conociendo a Duquesa tampoco te dejaría venir y solo estaríamos Finnick y yo eso sí sería lamentable – explico Nick.

Aunque podía hacer un esfuerzo para reunirnos, por lo viejo tiempo – indico el gato.

–Ája, si claro, quiero que le preguntes a Duquesa si te dejaría venir para Estado Unidos – respondió Nick.

El gato se quitó el auricular de oído, suspiro a ver a una gata blanca acostada a su lado y cuando este iba a tocar a su esposa aquel gato se dijo: A quien quiero engañar. Nuevamente volvió a ponerse el auricular y dijo: ¡Tienes razón Nick!

–Siempre la tengo O’malley – contesto Nick.

–Rayos en que momento me volví un sometido – expreso O’malley.

–Amigo por una mujer un hombre hace lo que sea y más si ella tiene todo lo que busca – reflexiono el zorro.

–No me digas que el famoso Nick Wilde está enamorado – asevero O’Malley.

–Como no tienes idea – respondió Nick.

–Vaya, Vaya Nicholas Wilde enamorado eso si es un milagro digno de reunir a la pandilla – puntualizo O’Malley.

Allí una voz tranquila de una gata exclama: ¡Thomas vuelve a la cama! El gato se quita el auricular de su oído y nerviosamente dice: y-ya voy cariño.

– ¡CARAJO!, tengo 10 minutos antes de que desconecte la llamada, así que necesita y que  sea rápido – replico Thomas.

–Bueno ya que eres dueño “literalmente” del restaurant Gladis Gil, necesito que me reserve una mesa para dos con todo pago claro está, ya que mi salario de policía no alcanza para todos los platos que sirven allí – afirmo Nick.

– ¡A HABERLO DICHO ANTES!, claro que sí, pero para que hora – contesto Thomas.

–A la siete en punto de la noche, hora de Zootopia Estados Unidos, no la hora de Francia – respondió Nick.

–Claro, ¿y eso es para cuándo? – contesto y pregunto Thomas.

–Mañana – respondió Nick firmemente.

–Ok, una reservación para dos a la siete de la noche a nombre de Nicholas Wilde con todos los gatos pago – afirmo Thomas.

Nuevamente una voz suave y tranquila de una gata dice: O’malley te quedan cinco minutos, sino no te dejare dormir el resto de la noche. El gato naranja muy asustado replico: ¡Ya voy cariño!

– ¡Carajo! Nick me tengo que despedir, pero si quiere mañana ósea hoy hablamos a respecto del grupo y nuestro posible reencuentro, pero hasta entonces no estamos hablando – dijo O’malley.

– ¡A dios O’malley! – se despido Nick.

–Hasta luego Wilde – replico Thomas colgando el teléfono, pero antes de acostase en la cama va un momento para el baño y luego se acostó a lado de su esposa y antes de cualquier cosa le pregunta a su esposa: ¿mi amor puedo ir a visitar a un amigo?

–Era Nick Wilde con el que estabas hablando – contesto la gata.

–Este… si, ¿Por qué? – respondió y pregunto el nerviosamente.

–Entonces no, porque si se algo es que algo malo está planeando y no quiero que te involucre – contesto Duquesa.

–Pero no vamos hacer nada malo – replico Thomas.

–Thomas no voy a cambiar de opinión así es que duérmete.

–Si Duquesa – respondió O’malley acostándose a dormir.

Ahora aquel gato naranja tenía que espera a que amaneciera para hacerle el favor a su amigo y antiguo socio de Nick.

Por otra parte Nick se queda tranquilo a saber que su ex socio le haría aquel favor y antes de quedarse dormido, a su mente viene un recuerdo muy feliz

––Inicio de Flashback––

Es el año 1989 en la cuidad de Las Vegas y la noche pasaba tranquilamente y más en una de la habitación de Hotel Cesar Palace un perro cazador estaba contando un faja de billete, mientras un zorro lo empaquetaba y lo metía en una maleta, mientras otro zorro fumaba un cigarrillo y jugaba carta con otro zorro el cual perdía adredemente solo porque era divertido, mientras era observado por otro zorro que le hacía señal al zorro que estaba fumando para que el otro vulpino perdiera, mientras un gato naranja los veía con interés y diversión mientras comía un pescado. Allí otro zorro entra proclamando: ¡El trabajo está más que hecho!, ¿Cuánto llevamos en ganancia Tod?

–2,5 trillones de dólares – contesto el zorro de la maleta.

–Esta es doceava maleta que empleamos ya – expreso el perro.

–Nick, ¿Qué haremos con tanto dinero así? – insinuó el Zorro de la señas.

–Aun no lo sé Robín, déjame que vamos hacer con todo ese dinero – contesto Nick.

–Por primera vez Nick no sabe qué hacer, eso sí es nuevo – dijo el zorro acostado con las cartas.

–Cállate John, no estas ayudando – replico Nick.

–La verdad a mí no me importaría llevarme tanto dinero – asevero el otro Zorro sentado con la cartas y con la típica voz sureña.

–Sí y ha esta maldita hora estaría metiendo preso – replico el gato naranja francés.

–O’malley tiene razón Brer si va aunque sea con una parte de ese dinero, mañana estaría preso – confirmo Nick.

–Bueno lo que me den es más que bueno, además no sabría en que lo gastaría – confeso Brer.

–Tampoco es que te vas a llevar una mísero 100 dólares te llevara una buena cantidad – reforzó Nick.

–Con esta última paca seria todo – informo el perro cazador.

– ¿En total cuanto seria? – pregunto Nick.

–2,5 trillones 400 mil 522 dólares – respondió Tod.

–Bueno, cada uno se llevara 500 mil dólares y lo demás lo dejaremos para hacer otro trabajo o a menos que lo necesitemos – indico Nick.

–Por cierto Nick, ¿y Finnick? – exclamo y pregunto Robín.

–Buscando el escondite perfecto donde esconde el dinero – contesto Nick.

– ¿Y todos sabremos su ubicación, ¡verdad Nick!? – enfatizo John.
–Claro que sí, ustedes creerían que me iría con todo el dinero para mí y Finnick – expreso Nick.

– ¡SI! – contestara todos.

– ¡Oh pero que poca confianza! – exclamo Nick de forma trágica.

–Oye tú mismo dijiste, “no es que no confié en ti es que no confió en nadie”, así que tomare tu palabra como validad – asevero el zorro sureño.

Aquella palabra dejaría a todos atónitos y allí aquel zorro dijo: ¡Oigan seré sureño, pero no estúpido! Esa palabra dejaría aún más impresionado a todos y allí Nick dice: Estúpido no, pero loco sí.

– ¡Ha bueno eso es otra cosa! – indico Brer seriamente.

–Bueno una vez que suene este teléfono todas agarraremos nuestra parte y nos iremos sin dejar rastro alguno, espero que el equipo se vuelva a reunir para otro asalto igual o mayor a este, sino… –

–Nunca más nos veremos – contestaron todos.

En ese momento el teléfono de Nick sonó y todo el equipo de Nick se paró y cada uno agarro dos maletas e irían saliendo de aquel cuarto y allí Nick cerraría la puerta del cuarto.

––Fin de flashback––


Aquel equipo se reunió otra vez en 1990, pero con una baja, el primo de Nick, Robín Hood se había casado Marian todos sabían que Marian Evans era importante empresaria del país, pero no sabían que tan importante era ya que ella era dueña de varias empresa incluyendo The Washington Post, luego de la misión de 1990, vendría la misión 1995 donde se sumarian dos bajas más al equipo, esta vez se trataría de John  y Brer, John se había casado justamente al regresar de la misión 1990 y en 1991 tendría a su hija la adora Tifanny quien ahora era el centro de atención de su padre y este no quería apartase de ella, por su parte Brer con la parte que le dieron en las dos misiones se compró una granja para tener algo más legal, ahí se enamoraría de una trabajadora de su hacienda, la cual era una hermosa zorra llamada Valery, luego de casarse se concentraría única y exclusivamente en su graja. Aquello casi afecto al grupo pero no tanto aunque durante esa misión había una franco canadiense que siempre se acercaba a Tod para coquetea con él y saber más sobre su actividades diaria y eso angustio a mucho en el equipo y luego de investigarla descubre que ella era una agente de la interpol y que esta le seguía el rastro luego de su misión en 1990. Luego Tod haría lo necesario para alejarla de la misión, primeramente la invisto a salir, luego a almorzar y a cenar, fue en una esa tanta salida que se enamoró de ella y antes que descubriera al grupo él se dio a la baja y con ello nada más dejaría al equipo casi incompleto, pero aun así aquello animales culminaron su trabajo, posteriormente Tod se casaría con Vixey y se uniera a la interpol aunque nunca jamás delato a compañero este tampoco los volvió a ver.

Después de eso el equipo se desintegro completamente ya que las misiones no eran lo mismo sin Robín, John, Brer, ni Tod y fue así que Toby y Thomas los penúltimos solteros del equipo se casaron con mujeres extraordinaria; dejando Finnick y Nick solo en el campo de las estafa, pero antes de finalizar los noventa Finnick también se había casado y había tenido dos hijos y con ese pretexto a la mano Finnick y Nick decidieron continuar con su estafa pero esta vez más pequeña para así no levantar sospecha y durante año funciono hasta la llegada de Judy a la vida de Nick, ahora este entendía porque una mujer te cambia tu vida, porque si ella comparte tu misma idea todo será diferente y fue así que termino la noche Nick en el hospital.

El despertador suena en la mansión Baddeley en Paris y Thomas se levanta tranquilamente de la cama, luego agarra su libreta en donde había anotado el favor de Nick, rápidamente bajo a su despacho levanto su teléfono y marco al restaurant de Gladis Gil de Zootopia y rápidamente es respondido: Gladis Gil, ¿en qué le puedo ayudar?

–Habla Thomas O’malley, tome nota de lo que le voy a decir porque luego voy a preguntar – contesto O’malley.
–Soy todo oído señor O’malley – respondió el joven.

–Hay una reservación para dos a las 7:00 pm hora de Zootopia claro está al nombre de Nicholas Wilde con todos los gastos pago – contesto O’malley.

–De acuerdo, déjeme confirma señor O’malley, quiere una reservación para dos a nombre de Nicholas Wilde a las 7 de la noche con todos los gasto pagos – recordó el trabajador.

–Si exacto – contesto O’malley.

–De acuerdo, ¿y para cuando seria eso? – contesto y pregunto el empleado.

– ¿Qué hora es allá en Zootopia? – pregunto O’malley.

–La 10 de noche – contesto el empleado.

–Mañana – respondió O’malley firmemente.

–Ok señor O’malley todo esta anotado – confirmo el empleado.

–Qué bueno irlo, porque señor en cuestión es un muy buen amigo mío y si todo sale mal, vaya buscándose otro trabajo, Mesie – informo O’malley.

–Señor solo tengo una pregunta muy importante, ¿Cuáles son los nombre de los hijos de la señora Duquesa? – asevero el empleado.

–Marie, Toulouse y Berlios, y antes que me lo preguntes Marie es una danzarina y cantante profesional, además que canta en la opera de Paris, Toulouse juega en futbol local de parís con P.S.G y Berlios estudia abogacía en la universidad de Paris – contesto O’malley.

–Señor O’malley solo era para confirma…–

–Y yo le voy a confirma una patada en trasero si trata mal a mi buen amigo Nick así es que ándese con cuidadito – replico O’malley.

–Entendido señor O’malley – confirmo el empleado.

–Que tenga buena noche mesie – asevero O’malley colgando el teléfono.

El trabajado se queda mudo y rápidamente llama al recepcionista y dice: ¡Oye Harold anota una reservación para mañana a la siete, a nombre de Nick Wilde! – enfatizo el gerente.

– ¿A la siete de la mañana o de la noche? – pregunto el recepcionista.

–De la noche, ¡ha y con todos los gasto pago! – replico el gerente.

– ¿Con todos los gastos pagos? – pregunto el recepcionista.

–Si con los gasto pago – contesto el gerente.

–Listo, los pondré en la mesa 8 del restaurant – confirmo el recepcionista.

–Buena idea – contesto el gerente dándose la vuelta para volver a trabajar.

Al día siguiente Nick despierta con gran ánimo sabiendo que aquel día tendría una cita con su amada conejita, pero antes debe espera a que le quiten todos los implementos médico, aunque una parte de él extrañaría aquella habitación, luego llegaron las enfermera y con ello se quitó todo rastro de extrañar aquella habitación y una a una las enfermera fueron retirando cada uno de los artefacto que sostenía su vida y al retíralo todo le dieron a Nick su uniforme el cual estaba lavado y planchado para él, Nick sonríe para después decir: ¡Muchas gracias! Nick entra en el baño de su habitación ahí se quita la ropa de hospital para ponerse su uniforme y cuando culmino de ponerse el uniforme este salió del baño y se dirigió hacia la salida de la habitación, sin que antes una enfermera dijera: Si algún día necesita diversión, ¡búsqueme!

–Tengo novia, búsquese la diversión en otra parte – respondió Nick tajantemente poniéndose los lentes oscuro para salir definitivamente de la habitación en dirección hacia los ascensores.

Por otra parte en el pequeño departamento dormía pacíficamente una coneja quien recientemente se le había otorgado algunos días libre de los cuales aprovecharía al máximo y por primera vez se daría el lujo de parase tarde, aunque su mente le decía párate, ella no le hacía caso, finalmente por allí a la diez de la mañana, la coneja por fin se para de la cama para sintoniza su canal favorito y ahí estaba dando una serie llamada: “la patadita y el orden” Ahí la aun soñolienta coneja dijo: ¡Vamos a ver que se trata!

Después de una media hora, aquella conejita proclamaba: ¡Eso es una tontería!, no tiene nada que ver con la escena del crimen. Ahí como si el televisor o los personajes la estuviese escuchando, uno de ellos diría: ¡Es una tontería, esto no tiene nada que ver con la escena del crimen!

–Tienes razón – contesto el otro personaje.

– ¡Por fin! – exclamo la coneja.

Instantáneamente el teléfono de la coneja sonó y ella ni corta ni perezosa contesta: ¡Oficial Judy Hopps!, ¿En qué le puedo ayudar?

– ¡Amiga como esta!, alguien por allí me dijo que estaba libre – replico una voz muy chillona pero conocida y Judy no tarda en responder.

–Hola Fru Fru, ¿Cómo estás?, ¿Cómo está mi ahijada?, ¿Cómo esta Mr. Big? – contesto y pregunto Judy amablemente.

–Yo estoy bien dentro de poco sacare mi línea de verano llamada Bis Yorker la cual me pone muy E-MO-CI-ONADA, por otra parte tu ahijada está feliz para pasar a primer grado y mi padre haciendo su “negocios” – contesto Fru Fru alegremente.

–Vaya que bueno es oírlo, ¿pero a que debo esta honorable llamada? – respondió y pregunto la coneja alegremente.
–Me preguntaba si podríamos juntarnos para salir de compras – se cuestionó Fru Fru.

–Claro, porque no – respondió Judy.

–Qué bueno, Terrence pasara por ti en 5 minutos – asevero Fru Fru alegremente.

–Está bien – replico Judy alegremente.

–Te veo en C. C. Big Low – informó Fru Fru.

–Ok Fru Fru – confirmo Judy colgando el teléfono para volver su vista hacia el televisor para según viendo la serie que tanto había llamado su atención.

Por otra parte Nick llega a la estación para dirigirse directamente a la recepción en donde estaba Finnick y allí dice: ¡Pero si es cachudo!

–Nick, ¿Qué diablos haces aquí? – contesto Finnick.

–Vine a molestarte la paciencia –replico– aunque Mercy no esté – añadió Nick.

– ¿Por qué no molesta a tu novia? – pregunta Finnick.

–Porque hoy tenemos una cita – respondió Nick relajadamente.

– ¿Y luego te la coges? – pregunto él groseramente.

– ¡Quizás! –Respondió– ¡Quizás!

–Que paso con el Nick que no se iba a someter ante el amor – persevero Finnick.

–Perdió la batalla, pero por eso coneja todo vale la pena – contesto Nick seriamente.

– ¿Y a donde piensa llevarla? – pregunto Finnick.

–Al Gladis Gil – contesto Nick tranquilamente.

– ¡El Gladis Gil!, pero el Gladis Gil es muy costoso y es casi imposible reserva ahí, ¿cómo lo hiciste? – asevero el fenec.

–Pidiéndole el favor a O’malley – respondió Nick.

– ¿Cuál O’malley?, ¿El O’malley de Luisiana o él O’malley de Francia? – pregunto Fin.

–El O’malley de Francia –respondió él– el O’malley de Luisiana no le hablo por haberse metido con mi madre – añadió Nick.

–Bueno, ¿Cómo esta ese loco? –

-Bien, pero sometido por su hembra, pero yo no tengo moral para reclamar nada ya que yo también estoy siendo sometido por Judy, pero a final de cuenta todo habrá valido pena – informo Nick.

–Bueno Nick, déjame decirte que cuando un ama a una hembra, uno hace lo que sea por cumplir cada uno de su caprichos – contesto Finnick.

–Una cosa que si me dijo O’malley era para reunir a todo el grupo para un recuentro casual – insinuó Nick.

–Si sería genial reunir a toda la pandilla, aunque causaría algo de pánico la reunión – aseguro Finnick felizmente.

– ¡Tal vez!, ¡Tal vez!, pero solo es un rencuentro – comento Nick.

–Sí, pero de toda manera habría sujeto que se asustaría mucho, solo por el hecho de reunirnos todo juntos – enfatizo Finnick firmemente.

–Tal vez, pero hay que ser realista Fin, Robín no va vendría es el lame bota de su Marian, además que Marian no lo dejaría venir sabiendo de su pasado porque el muy torpe se lo conto, por otra parte John vendría porque su esposa no es tan controladora, pero su hija que si lo es no le dejaría venir, Brer también tiene la fortuna de no tener una esposa tan controladora, ni hijos controladores tampoco, pero la granja si le quita tiempo y no podría venir ni con eso, ahora Tod no vendría teniendo caso muy grandes en la interpol junto a Vixey… –

–Aun la sigue odiando – comento Fin.

–Claro, pero ya eso es parte del pasado; Toby  tampoco vendría la esposa lo tiene como amo de casa mientras ella es la que trae el pan a la casa… –

–Y eso que entre nosotros él era el más indomable, parece ser que todo apunta a que él no iba a ser el dominante en la relación, sino que iba a ser su hembra – puntualizo Finnick.

–Pero ninguno se puede quejar – replico Nick; –Y finalizando O’malley no vendría tiene muchas responsabilidades que atender y con ello me refiero… –

–A su esposa – contestaron ambos.

–Solo quedamos tú y yo – asevero Nick.

–Sí, no es lo es lo mismo sin todo el equipo – persevero Finnick.

–Por cierto, ¿Y Mercy dónde está? – pregunto Nick.

–Se siente mal, me dijo que tenía dolor de estómago y que no podía venir – respondió Finnick.

–Hmm – se extrañó Nick recordado aquella revelación hecha por el puercoespín hembra, pero luego dijo ¡Quizás comió algo en mal estado!

–Sí, eso es mismo que ella dijo – contesto Finnick; –Luego paso por su casa para ver cómo sigue – informo Finnick.

–Creo que no es mala idea, pero yo debería ir primero para ver cómo esta – aseguro Nick seriamente.

– ¡Que buena idea! Y así tendré tiempo de pasar por la casa para llevarle la famosa sopa de cebolla de Tini – afianzo Finnick.

–Esa es una grandiosa idea Finnick – contesto Nick; – ¿Cómo le dijo que Mercy está completamente enamorada de él? – pensó Nick seriamente.

–Bueno le diré a Tini que se la ponga hacer – asevero Finnick.

Nick iba a decir algo, pero allí la voz de su jefe lo saco de su pensamiento: Wilde que haces aquí, se supone que tienes reposo, si no te vas ahora mismo te obligare a trabajar este día.

–Sí señor, ya me voy – contesto Nick retirándose de la estación, mientras Finnick se ríe de él.

Finalmente la noche llega a la cuidad de Zootopia y Nick espera impacientemente a su novia, justamente en ese momento una limosina blanca se detiene en todo el frente del restaurant y de ella se baja una sensual coneja la cual Nick reconoció como su novia y cuando esta finalmente llego al frente del zorro esta dice: Esperaba a alguien.

–Si a mi novia, no esperaba a una súper modelo – contesto Nick atónito.

Judy le sonrió y le dijo: ¡Todo esto fue idea de Fru Fru!

–Darle mis gracias de mi parte – informó Nick firmemente.

–Así lo hare, pero hoy esta noche es nuestra – aseguro Judy.

–Estoy de acuerdo Lady Hopps – contesto Nick agarrando una de la patas de Judy para besarla en acto para que después el zorro dijera: ¡Siempre quise hacer eso!

– ¡Ay Nick!, tú y tu ocurrencias – asumió Judy alegremente.

– ¡Vamos querida Judy, tenemos una importante cita que cumplir! – dijo Nick poniendo el brazo para que la coneja lo entrelazara con el suyo y así lo hizo  y rápidamente la pareja se dirige dentro del restaurant, al llegar a la puerta Nick pregunto por su reservación y aunque el recepcionista se extrañó pero este consiguió la reservación de Nick, he inmediatamente el recepcionista lo deja entra, luego un mesero los llevo hasta su mesa y posteriormente irse a buscar un menú y mientras el mesero volvía ambos animales se sienta y ahí Judy pregunta: ¿Ha quien estafaste para conseguir una reservación aquí?

– ¡Oh Judy, me ofendes con esa acusación!, pensé que todo rastro de duda hacia mi… –

–Ya dime – asevero Judy firmemente.

–Es en serio Judy, yo no he estafado a nadie para conseguir esta reservación – replico Nick a la defensiva.

–Parece irreal que estemos en unos de los restaurantes más lujoso y costoso de la cuidad, de la noche a la mañana, por cierto como piensa paga todo esto – persevero Judy.

–Nosotros no vamos hacer tal cosa, ya que todo lo que comamos acá está completamente pagado – aseguro Nick jocosamente.

– ¡Que!, ahora sí, dime a quien estafaste para hacer eso – alentó Judy firmemente.

–Está bien, le pedí a un viejo amigo que me hiciera el favor de hacerme una reservación con todos los gastos pago, ¡FELIZ! – explico Nick algo molesto.

–Vaya Nick, no lo sabía – contesto Judy mas compresiva.

–Ahora que lo sabes, comencemos nuestra velada – alentó Nick alegremente.

La velada de Nick y Judy transcurrió tranquilamente hablando de cosa que pensaba hacer para el futuro y pensaba en un plan de retiro, fue allí que Nick dijo: ¡Tenemos que ayudar a Mercy!

– ¿Qué pasa con Mercy? – pregunto la coneja.

–Tenemos que ayudarle a superar a Finnick – contesto Nick.

– ¡Ah sí!, se me olvidaba que Mercy está enamorada de Finnick – anuncio Judy.

–Si hay que ayudar la con ese enamoramiento antes que haga algo loco – persevero Nick.

– ¿Tú crees que haga una locura? – pregunto Judy.

–La verdad es que no lo sé – contesto Nick mirando a su coneja y allí esta dice: Uno por amor hace lo que sea. Judy le regresa la mirada tierna y allí en presencia de todos la lagomorfa besa a su vulpino con tanta pasión que podía decirse que estaba siendo algo brusco con él, pero ambos no le parecía impórtales y luego de separase Judy dice: No sabes cuánto te amo.

–Y yo a ti – respondió Nick alegremente abrazando a su pequeña conejita para luego sentarse y continuar su estupenda velada.

Lejos de allí en la prisión de máxima seguridad de Zootopia conocida como Castel Fingir; un oso polar dormía pacíficamente hasta que alguien lo llamo: ¡JEAN PIOLAR!

–Ahh, di-diga – respondió aquel oso muy soñoliento.

–Tienes una llamada – contesto el guardia.

Piolar se extrañó por aquello, pero aun así no perdía tiempo en contéstala, así que dejo que el guardia lo escoltara hasta el teléfono y llegando allí el guardia lo libero de sus esposas para que este agarra el teléfono y al hacerlo Piolar responde: ¡Bueno!
–Espero no haberle importunado señor Piolar – contesto la voz de una hembra.

–Señora… –

–Shh, te están escuchando, voy a ser breve y concisa – contesto la voz fémina.

–Entendido – respondió Piolar firmemente.

–Piolar a mí no me sirve preso por eso te voy a sacar de allí – persevero la hembra misteriosa.

–Pero mi señora como hará eso – replico Piolar.

–Tú no eres el único con contacto en bajo mundo de Zootopia, solo te pido que sea paciente y saldrá de ahí prontamente – aseguro la hembra misteriosa.

–Gracias mi señora – contesto Piolar.

– ¡Aun no me lo agradezca!, tendrá tiempo suficiente para eso – persevero la hembra.

–Desde luego mi señora – contesto el oso polar alegremente.

–Solo espera mi llamado – informo la hembra misteriosa firmemente.

–Esperare impacientemente esa llamada – afirmo Piolar con una gigante sonrisa en su rostro, luego cuelga el teléfono para volver a su celda.